viernes, 17 de abril de 2009

yo

Esta tarde
Atardeció mas tarde,
Para esperarte.
Ya anocheció y
Las estrellas fugaces se fugaron.

Vas en mi bolso cruzado
Y no en mi cartera vertical del hombro izquierdo
Estas en mi pelo mojado de las 7:40
Y en mis resacas de espuma verde los sábados en la mañana.

Los hermanos

El errante, ya no ángel estudia para la prueba de selección universitaria, su hermano se lo ha pedido, y él no tiene ideas propias. No es difícil piensa, soy capaz, como también lo soy de…
Hermano mayor: Te busqué un trabajo, tienes que estar mañana a las 8:00 de la mañana en la empresa.
Errante: de qué?
Hermano: ni de ingeniero, ni de gerente po weon!
Errante: jajaja, pero en serio Marco, que tengo que hacer?
Marco: ir sin jeans y con camisa, hablar con Don Arturo y decirle que eres mi hermano, te van a pasar una camioneta, vai a ser junior.
Errante: o material pal webeo también,y cuánto me pagan?
Marco: shii! Tenis doctorado?
Errante: ohh disculpa por no haber sido como tú, ya déjame dormir weon!
Marco: (abre la ventana de su habitación) báñate retoño, tai … (se retira)

En la universidad

Hay elección de centro de alumnos, Daniel el hermano de Pablo ganará, todos lo comentan, es brillante, educado, centrado, responsable, un líder nato, solo que abusa de la marihuana.
Ella está vendiendo esta semana, necesita el dinero, a parte de beber también ama la ropa negra, es la típica adicta a las liquidaciones, no se resiste a una blusa negra y con encajes.
Pablo: Necesito 5 pal Dani.
Ella: te va a dejar de vocero de gobierno?
Pablo: naa, es que tu cachai que el cabro tiene una imagen que cuidar.
Ella: ya, ahí tan, y van con cariño!
Pablo: (se acerca a su oído izquierdo, le entrega el dinero) Con la Tamara comentábamos que te luciste, pa ser el primer trio.
Ella sonríe.

Ellos

Diablo: Lo desterraste para mi?
Dios: eres capaz de…!
Diablo: (interrumpe) conmigo no te hagas el superior, eso déjaselo a la iglesia! Jajajjajaa, míralo, es tan bello, cuánto pagaría un viejo macabro por su delicado cuerpo? a pesar de todo el aporreo se ve tan apetecible.
Dios: te lo advierto, te quiero lejos de él!
Diablo: ohhhhhh! Dios me ha advertido! Pobre, que añejo y cansado estas, ya no eres el mismo loquito de antes. Pensar que disfrutaba ver a las parejas extraviar sus miradas en el horizonte, cuando pintaba atardeceres por el mundo.
Dios: pensar que fuiste tan brillante.
Diablo: aún lo soy, pero ellos lo son mas que nosotros, cuanto tiempo llevan en esta tierra y cuanto se han demorado en oxidarse?
Dios: soy eterno y puedo rehacerlo todo.
Diablo: yo también soy eterno.

El ángel

Finalmente el ángel errante ha sido desterrado, Dios está furioso, ha perdido ya a tantos, él era uno de sus favoritos, ahora volverá a la vida mundana, igual de errante pero ya sin protección. Despierta, hace tanto que no sentía en una resaca los dolores del alcohol, su vieja cama tiene las mismas dos frazadas, viejas igual que los posters que pego hace ya varios años para decorar su habitación, cuando creyó que no era mas un niño, hay olor a humedad, a soledad, al abandono de su padre, a la ausencia de su madre, no llora porque está recordando que tiene un hermano, el amigo incondicional que jamás lo abandonaría, su verdadero padre, el que tuvo que hacer las veces de mamá, de apoderado cuando aún no abandonaba el liceo, el mismo que rescató de una intoxicación de medicamentos, el mismo que lo golpeó cuando robó en casa de su ex novia.

x

Yo también
Ella no quería salir esta noche, estaba por quedarse dormida y sonó “One” de Metallica en su teléfono móvil, no era el diablo, no era Dios, era Pablo, uno de “esos amigos” – a las 11:30 en el bar, colgó.
Se sentó en la cama, miró hacia la ventana cobijada de estrellas. Tras la cortina arrollada se desprendía una silueta, el diablo estaba de pié recostado contra la pared sosteniendo su abrigo negro, le sonreía dulcemente.
- esta noche saldré con chaqueta, prefirió ella,
- lleva el abrigo, insisto, más tarde te servirá, le sugirió el diablo.
Se vistió rápidamente esta vez, ya eran las 11:00, ella es puntual.
El certamen de 2 horas había estado estresante, pero ella estudia “no soy brillante”, siempre explica, y para ella piensa “no puedo fallarle a mi familia”. Le dolía la cabeza de trigonometría, la sala estaba tibia, por dos horas fue libre, por dos horas, no había fantasmas, no estaba el diablo, tampoco pensó en pedir ayuda a Dios, “El no está estudiando mi carrera”.
Fue caminando hacia el bar, hace una semana vivía en el centro de la ciudad, había sido idea del diablo, además sus amigas ya estaban pensando en correrla del departamento.
Cruzando la plaza, bajo un árbol mediano, se encontraba el ángel errante, el que Dios expulsa en las noches porque le ha traicionado, viste pantalón y chaqueta de cuero, obviamente negro, bototos y una polera de Caníbal Corpse, el viento agita su lisa, larga y negra cabellera escalonada, exponiendo su lozano y joven rostro, ella evita observarlo, pero existe una pecadora atracción por este individuo menor que ella.
Quisiera que un ángel me salvara esta noche, pero me aguarda Pablo, pensaba, - y aún sueñas con eso, ilusa o demente, nadie te salvará nena, mucho menos un ángel, yo estoy para ti siempre, tu eterno enamorado, eres mía en noches como estas, es ahora cuando pavimentas el camino que algún día te llevará a mis tierras, le susurra el diablo.
- Me duele la cabeza Pablo.
- Estuvo heavy el certamen?
- Si
- Vamos a emborracharnos, te lo mereces!
- Si, además aliviará mi cabeza.
Diablo: bien pensado amor mío, eres tan creativa cuando atribuyes facultades curativas al alcohol.
Adentro: una nube de humo y rock, una banda local toca “Territory” de Sepultura, Pablo ya está sirviendo el 2º vaso de cerveza y ella cabecea una de sus canciones favoritas. El ángel errante ha llegado, la observa desde una esquina, ni la obscuridad de las paredes, el humo y la gente pueden matizar su anémica cara, “los humanos están más perdidos que yo” piensa, “por lo menos no tienen que rendirle cuentas a él”.
Una hora mas tarde, regresando del baño, Pablo esta de pié recostado en un pilar coqueteando con otra, ella sabe que no le corresponde celarlo, no es suyo formalmente y tampoco es lo que quiere. Tamara es presentada una vez que se reincorpora al sitio, le explican que quieren hacer un trío sexual, a ella ya no le sorprende nada, menos de Pablo, lo han hecho hasta en la calle contra un árbol, está indecisa, el diablo está detrás de ella, la toma por la cintura, acaricia sus muslos y aprieta su trasero. Accede.
Antes de comenzar Tamara y Pablo fuman cigarrillo de marihuana cada uno, la habitación de Tamara refleja su ternura, feminidad y sutileza, “porque no puedo ser así?” está pensando. Está cohibida, hay otra mujer ahí, Pablo se incorpora detrás suyo, la besa, presiona suavemente sus pechos, Tamara está frente a ella, intenta besarla, no quiere, nunca había estado con una chica, él mueve la yema de su dedo índice sobre su clítoris, circular, lenta y presionando paulatinamente, ella gime dulcemente, frágil como suplicando que alguien salve su vida, pero nadie la está esperando, ella lo sabe, el diablo lo sabe también, ya está entregada.
Camina de regreso a su casa, sube todo el cuello de chaqueta, hace frío y el diablo le recuerda cuanto le insistió – abriga tu cuerpo helado y pecador, más la vergüenza jamás reposará tibia! Le dice.
El diablo no le ayuda a subir las escaleras esta vez, se adelanta unos peldaños para burlarse de ella – ah, ah ah! - gime el diablo imitándola - no te enojes nena, estuviste sorprendente esta noche! Ella llora en la baranda de la escalera, el diablo la abraza – sube preciosa, si Doña Inés se despierta serás muy popular en esta casona!
Enciende un cigarro en la ventana, hace 2 semanas que no fumaba, luego duerme sin desprenderse de su ropa, el diablo atina a quitarle sus botas y a cubrirla con el viejo plumón herencia de su abuela. Sueña haciendo el amor con el ángel errante, en el suelo de una habitación abandonada. Al despertar recuerda el ejercicio sexual de la noche anterior, es sábado, debe estudiar, no llora, siente sucio su cuerpo pero nunca se arrepiente.

domingo, 5 de abril de 2009

Hay algunos que están destinados a pecar, hay otros que Dios ha dejado en soledad y solo necesitan un empujoncito para caer en el infierno.


Yo
Esta noche mi noche no está estrellada, me visto lentamente y termino a sorbos la segunda botella de vino, en la casa beben vino junto a la chimenea en invierno, y degustan algún queso, mi viejo toca la guitarra y mamá canta alguna canción de Silvio, o se juega brisca, o simplemente conversan.
Caballerosamente me ayuda con el abrigo y apaga la luz. Afuera camino de su brazo, él observa las estrellas que no alcanzo a ver, en la esquina un grupo de adolescentes le silban a unos travestis y se burlan. No logro enfocar un colectivo, quisiera estar sola esta noche, pero el decidió estar nuevamente conmigo, no le preguntaré hasta cuando?
Entro al bar: Un ángel descarriado cabecea una canción de Pantera, solo y sosteniendo fuertemente la botella de cerveza que tiene en la mesa, otros ángeles se incorporan a su mesa, le saludan y lo observan con compasión, intentan llevárselo, pero se retiran sin lograrlo.
Botellas fugaces iluminan mi semblante y vuelvo a sonreír para él, solo para él. Se sienta frente a mi, junto a mis fantasmas ¡quisiera estar sola esta noche, pero él diablo decidió estar nuevamente conmigo! Un amigo me ofrece un cigarrillo, es su mano la que toma la mía para que lo encienda, yo fumo para agonizar mi llanto, él fuma para dibujar sedas que se evaporan en mi rostro.
Dios no salió conmigo está noche, está cansado de salvarme – Dios, él es más fuerte que mi, pero Tú lo eres más que él!!!!!!!!
Solo el diablo se percata de que lloro aún cuando logro sonreír con las anécdotas de la mesa! ¿Cuánto tiempo falta? ¿Cuántas botellas más? Ya no quiero beber y estoy bebiendo de la botella, ahora quisiera estar sobria para entender! El azúcar está en el salero, flores nunca hay en mi casa, si es que a eso se le puede llamar casa, porque un hogar jamás lo será, a menos que yo me valla, las chicas siempre están con sus parejas, invitan a algún amigo “pa que no esté sola”, yo termino conversando con cualquier chico del bar.
Los fantasmas se han marchado a casa, me esperarán con la cama helada nuevamente. Una botella más, o un ron! Mierda! Hasta el diablo sabe cuando debo parar. Todos se fueron, no querían dejarme sola, pero no se puede con mi poder de convicción. Un último cigarro, yo le sonrío para intentar convencerlo. Quisiera acostarme con un ángel esta noche, pero todos se fueron con sus novias, el ángel errante duerme sobre la barra, abrazando la botella que lo aguarda con un octavo de cerveza, casi espuma.
El diablo para un colectivo y me invita cordialmente a subir, una vez sentada me besa, su boca sabe a miel y su cabello huele a las cenizas de mi casa.
La vida es tan corta como para evitar el placer ahora – me dice – tu eres tan joven, con un gran futuro, arruínalo ahora antes que sea demasiado tarde, esta noche no me llevo tu alma, la tendré cuando una soleada mañana una última resaca te obligue a terminar, ahora dulce niña, duerme en mis brazos, cuidaré que llegues a tu casa y arroparé tu pesadilla, no, no, no, no intentes mantenerte despierta, el alcohol no puedes exiliarlo de tus venas.